Argentina palpita la final por la Ensaladera ante Croacia y Daniel Fidalgo, vicepresidente primero de la AAT, cuenta cómo trabajan en conjunto jugadores, cuerpo técnico y dirigentes.
Por Pablo Amalfitano
Desde Zagreb, Croacia/Especial
para LA CAPITAL
Cada vez falta menos para la final mundial de la Copa Davis en Zagreb, donde Argentina buscará su primera coronación tras perder cuatro definiciones previas. “Ojalá que sea la vencida; llegamos hasta acá porque cada uno hizo lo que tenía que hacer en su rol”, desliza Daniel Fidalgo, con pasado y presente muy ligados al tenis argentino.
Descubridor y ex entrenador de Gabriela Sabatini, nada menos, “Palito” comprende como pocos el momento que vive el equipo argentino en vísperas de otro acontecimiento histórico. Sin embargo, sostiene en diálogo con LA CAPITAL que ganar o perder sólo dependerá de lo que suceda en la cancha: “El resultado estará ligado al tenis y no a ninguna otra circunstancia”.
-¿Por qué se puede ganar esta final?
-Nosotros estamos muy bien y creemos que podemos ganar. Hicimos lo mejor en cada una de nuestras funciones. Ahora les toca a los jugadores, que son los que salen a la cancha. Todos los demás acompañamos y llevamos adelante un proceso pero los que juegan son ellos. Nosotros somosdirigentes y nos abocamos a dirigir, no tenemos por qué opinar en cuestiones técnicas. El cuerpo técnico tuvo un gran respaldo por parte de la dirigencia. Los chicos están muy compenetrados en jugar y dar todo por ganar esta serie.
-¿Cómo analizás la superficie y las pelotas?
-Acá tengo que opinar como dirigente. Los chicos ya dieron el veredicto sobre esta situación y quizá esperaban una cancha más rápida. Pero nosotros como dirigentes veníamos de una protesta porque la cancha estaba muy rápida en Polonia y ahora nos encargamos de que la mención se hiciera a término para tener tiempo de reclamar un cambio en caso de que la superficie estuviera por fuera de los límites de velocidad. Es cierto que la cancha no está tan rápida pero también hay que remarcar que con el correr de los días se va a poner más rápida. Sabemos cómo es la Copa Davis y el plus que tiene el local; nuestros chicos se adaptan bien y van a dar el máximo.
-¿Qué puntos fuertes tienen Croacia y Argentina como equipos?
-El equipo croata es realmente muy fuerte. Cilic atraviesa su mejor momento. Dodig es un doblista excepcional. Karlovic es un rival para tener en cuenta siempre. Y Coric, que viene de la lesión pero se lo ve bastante recuperado. Por algo están en la final. Pero nosotros estamos muy bien. Cualquiera de los chicos puede salir a la cancha y ganar un punto. Y cualquiera puede no jugar pero estar a favor de que los demás ganen los puntos. Fijate que Fede (Delbonis) no jugó en Glasgow pero nosotros llegamos ahí gracias a los dos partidos que él ganó en Italia. Estas cosas marcan a un equipo. Las individualides son importantes pero el esfuerzo de una sumatoria de individualidades es muy superior. Creemos que estamos muy bien y todos nuestros jugadores tienen además un ranking mentiroso. Van a dar el cien por cien.
-¿Te sorprendió la inclusión de Borna Coric entre los titulares?
-No me sorprendió porque su operación de rodilla quizás fue de rápida recuperación, cosa que a veces suele suceder. Que Coric integre el equipo se puede leer de dos maneras: puede ser que ellos quieran que esté el equipo completo ante la posibilidad real de ganar la Copa Davis, o bien que lo hayan puesto porque de verdad está en condiciones de jugar. Las dos situaciones son factibles. Por lo que vimos está bien; ahora hay que ver si está bien para jugar al mejor de cinco sets y también cuántos partidos puede jugar.
-¿Lo imaginás el viernes contra Del Potro?
-Esto es un juego de ajedrez. Te miento si te digo que sí. En la Davis tenés cuatro jugadores y se supone que los cuatro están para salir a la cancha. Ya veremos qué deciden, porque quizá también piensen en Coric para un quinto punto y no para el viernes.
-¿Qué se puede decir del trabajo integral que realiza Daniel Orsanic entre la capitanía de la Copa Davis y la dirección de Desarrollo de la Asociación?
-Con Daniel son todos elogios. Cuando elegimos al director de Desarrollo buscamos dos cosas. Primero buscamos la capacidad profesional y después tuvimos en cuenta que ese profesional transmitiera los valores y principios que tiene el tenis y que a veces pasan muy inadvertidos. Un perfil de persona con una forma determinada de manifestarse, transmitir conocimientos y tomar decisiones. La verdad es que Daniel encaja perfecto. Con el tiempo no nos equivocamos. Salvo algunas oposiciones internas, creemos que su trabajo en Desarrollo es muy bueno. Y lo elegimos como capitán porque queríamos alguien que bajara la misma línea en el campo profesional. Nuestro equipo de Copa Davis, que es la punta del iceberg, recibe los mismos valores y las mismas ideas de cómo representar al país. Hicimos lo mismo en la Copa Federación con el Negro Marcelo) Gómez, que también trabaja en Desarrollo y transmite los mismos valores.
-La satisfacción por el trabajo de este equipo va más allá del resultado de esta final…
-Sin dudas. Lo que voy a decir es muy difícil para nuestros compatriotas. Cualquiera sea el resultado, acá ya se ganó. Este equipo derribó el mito que sostiene que de visitante no se puede ganar. Nosotros ganamos todas las series afuera. Por pensar mal en Argentina a veces nos dicen que el tenis no está bien. ¡Los tenistas argentinos ganaron 20 Challengers este año! Y el país que le sigue a Argentina es Francia, con cinco. Todo eso más los resultados de los Juniors. Eso es lo que buscamos. Lo más importante es la integración del tenis. Acá vamos a llegar al domingo y vamos a ganar. Y si no ganamos será por un mero resultado deportivo, no por otras cosas.
-Se habló tanto de la “muerte” del tenis argentino después de La Legión que es muy importante remarcar estas cosas…
-La Legión es algo diferente. Pero no fue un efecto del tenis argentino. Pasó en el básquet con la Generación Dorada y en el hockey con Las Leonas. También en el vóley. Acá hubo una situación como el 1 a 1 que no fue buena para el país pero sí fue muy buena para nuestros deportistas. Todos ellos tienen un verdadero roce internacional. No se puede decir que el tenis no está bien porque no tiene más una Legión. Todos los deportes siguen su proceso. La Legión no fue real. Existió pero no fue una realidad. Ahora, ojalá que estos chicos puedan lograr la Copa Davis. Ganar la Copa Davis no es la meta sino el comienzo. Si la ganamos tenemos que aprovechar todo esto mucho más.
-Si gana Argentina… ¿cómo imaginás el domingo a la noche?
-… Me emociono un poco (la voz quebrada)… Perdón, me emociono porque tengo mucha pasión por esto. Lo primero que puedo decir es “me muero” aunque espero no morirme sino disfrutar… Voy a estar muy contento (otra vez la voz entrecortada) … porque todos sabemos lo que pasaron los chicos para lograr esto. Si no ganamos también voy a estar muy contento porque se cumplió con un proceso y se cumplió con la palabra. Ojalá que esto sea el inicio de una transformación en el tenis argentino.